“When the schools closed, everything changed.”

“When the schools closed, everything changed.”

By Susana Muñoz, Building & Grounds Worker, Esteban Torres High School

Our job is to disinfect classrooms, doors, computers that are being released to students, everything in detail. The work is important and needs to be done. My own children are in school and, as a parent, I know that you feel safer if the schools are clean and the students have all the equipment they need.

When the schools closed, everything changed. At work we do have masks, gloves, disinfectant. We try to practice social distancing, but sometimes it’s difficult. Right now, we’re helping the principal with the computers that are being distributed to students for online learning. I clean the computers when they take them to school for repairs and I clean them before they are delivered to the students. The other day we had to clean 300 computers.

I feel good to be serving the students. They need to continue learning. To a certain extent, we try to comply, but I admit we do feel afraid. Right now, nobody is sure. I think about getting sick and getting my children sick. We were told that if anyone at school were to have the virus, we would all be in quarantine. There are many risks. I do worry a lot.

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“Cuando cerraron las escuelas, todo cambio.”

Susana Muñoz, Trabajadora de Mantenimiento, Esteban Torres High School

Nuestro trabajo es desinfectar los salones, las puertas, las computadoras que se les están entregando a los estudiantes, todo en detalle. El trabajo es importante y se necesita hacer. Yo tengo hijos en las escuelas y como padre de familia yo sé que uno se siente más seguro si las escuelas están limpias y los estudiantes tienen todo el equipo que necesitan.

Cuando cerraron las escuelas, todo cambio. En el trabajo sí tenemos máscaras, guantes, desinfectante. Nos guardamos la distancia. Pero a veces no se puede guardar la distancia. Ahora, estamos ayudando al director con las computadoras. Yo limpio las computadoras cuando las llevan a la escuela para que las revisen si no sirven y las limpio antes de que se las entreguen a los estudiantes. El otro día tuvimos que limpiar 300 computadoras.

Me siento bien de estar sirviendo a los estudiantes. Ellos necesitan seguir aprendiendo. Tratamos de un cierto modo de cumplir, pero si se siente uno con miedo. Ahorita nadie está seguro. Me puedo enfermar yo y enfermo a mis hijos. Nos dijeron que, si alguna persona en la escuela llegaría a tener el virus, todos estaríamos en cuarentena. Tiene muchos riesgos. Sí me preocupo bastante.